El presidente electo Donald Trump fue sentenciado formalmente el viernes en el caso de Stormy Daniels, pero el juez se negó a imponerle castigo alguno.
El resultado consolida la condena de Trump y lo libera para regresar a la Casa Blanca sin la amenaza de una pena de prisión o una multa.
La sentencia de Trump de absolución incondicional pone fin a un caso que rompió las normas: el expresidente y el futuro presidente fue acusado de 34 delitos graves, sometido a juicio durante casi dos meses y condenado por todos los cargos.
Sin embargo, el desvío legal -y los sórdidos detalles que se ventilaron en el tribunal sobre un complot para ocultar las acusaciones de amoríos- no lo perjudicaron ante los votantes, que lo eligieron para un segundo mandato.
A Trump se le acusó de falsificar los registros de su empresa para ocultar un pago de 130 mil dólares a la actriz para contenido de adultos, Stormy Daniels.
A ella le pagaron, hacia el final de la campaña de Trump de 2016, para que no le contara al público sobre un encuentro sexual que, según ella, ambos tuvieron una década antes.