El compromiso de México de reforzar la frontera norte para disminuir los volúmenes de migración, reducir a la delincuencia organizada y el tráfico de fentanilo a Estados Unidos es un gasto no contemplado y que puede presionar las finanzas públicas, señaló HR Ratings.
La calificadora afirmó que el despliegue de 10 mil elementos de la Guardia Nacional en la frontera con Estados Unidos, como parte del acuerdo al que llegó México con el vecino del norte para pausar los aranceles que le impuso de 25 por ciento el 1 de febrero pasado, no está contemplado en el presupuesto de este año.
“Podría presionar el nivel de gasto durante un tiempo indeterminado, sumado a las nuevas funciones que se podrían realizar en la frontera. Asimismo, una política exterior más severa por parte de Estados Unidos, en comparación con los años anteriores, implicaría la creación de programas presupuestarios adicionales dentro del paquete económico para atender la entrada de connacionales e integrarlos dentro de la economía nacional”.
HR consideró que la pausa en los aranceles es positiva en el contexto de la desaceleración de la actividad económica en el último trimestre, lo cual se pudo haber agravado en el primer trimestre de este año con la entrada en vigor de esta medida.
Además, dijo que, aunque existe la amenaza de la implementación de aranceles en el corto y mediano plazo, con las conversaciones entre los equipos de comercio, economía y seguridad de ambas naciones, el presidente Donald Trump está “más consciente” de lo que implican los aranceles a las exportaciones mexicanas siendo su principal socio comercial.
Abundó que, a pesar de que los riesgos para la economía mexicana han disminuido de manera importante en el corto plazo, es posible que existan cambios relevantes en la política comercial en el mediano y largo plazo, con una posible renegociación anticipada del T-MEC.
T-MEC pone en riesgo Inversión Privada
Ante esta situación, HR Ratings puntualizó que los riesgos para la inversión privada dentro de México, especialmente la nueva Inversión Extranjera Directa (IED), se pone en riesgo hasta que la renegociación del T-MEC concluya, lo cual tendría un impacto significativo dentro del sector manufacturero mexicano.
Por su parte, Moody’s Local México remarcó que la incertidumbre sobre cualquier aumento de aranceles eleva el riesgo de una desaceleración económica más profunda en el país y una reducción en los niveles de IED con impactos variados en diferentes regiones y sectores.
Estimó que los emisores de los sectores corporativos, estados y municipios, instituciones financieras y finanzas estructuradas pueden absorber este cambio en la política comercial estadounidense, siempre que los aranceles tengan un carácter temporal.
“Sin embargo, no se puede descartar un impacto mayor, en algunos sectores, ante una interrupción en la relación comercial más prolongada y un sostenido endurecimiento de la política comercial”, sostuvo.