Donald Trump asumió la Presidencia de Estados Unidos hace apenas 18 días y pareciera que el mundo está cambiando rápidamente.
Por lo pronto, la opinión pública en México ya está mostrando cambios en su percepción y preferencias. Las encuestas están registrando un endurecimiento en la postura de la gente hacia el gobierno de Trump.
De acuerdo con la encuesta que publicó EL FINANCIERO a lo largo de esta semana, la percepción acerca de las relaciones entre México y Estados Unidos se ha deteriorado.
Se trata de un cambio de opinión significativo y en relativamente poco tiempo: a finales de enero, 31 por ciento veía una relación buena o muy buena entre ambos países, apenas la mitad de lo que se registró seis meses antes, en agosto, cuando esa opinión representaba 61 por ciento.
Por su parte, la opinión de que la relación bilateral es mala o muy mala alcanzó 47 por ciento a finales de enero, tres veces más de lo que era en agosto pasado, 14 por ciento.
Esa percepción probablemente refleja la carga de temas álgidos como las deportaciones de connacionales, la amenaza de imponer aranceles, así como el flujo de drogas, armas y crimen organizado, entre otros asuntos que atañen directamente al país.
Esto, aunado a la mala imagen que tiene Donald Trump en México, se ha traducido en una creciente oposición a colaborar con el país vecino.
La encuesta que se publicó el día de ayer indica que 24 por ciento de las personas entrevistadas cree que México debe colaborar más con Estados Unidos en contra del crimen organizado; pero una clara mayoría de 74 por ciento no lo ve así y opina que el gobierno debe defender la soberanía nacional y no permitir que EU se meta.
Y no es que la opinión pública nacional no esté preocupada por la inseguridad: 78 por ciento la ve como el principal problema del país, cifra récord que no se veía desde hace varios años. Es la posibilidad de que, bajo la etiqueta de “grupos terroristas”, Trump pudiera enviar tropas al país a combatir a organizaciones criminales.
En su discurso de ayer en Querétaro, la presidenta Sheinbaum enfatizó la defensa de la soberanía.
En el año 2023, las opiniones que arrojaba esta misma pregunta mostraban una opinión pública más dividida, incluso con una ligera mayoría a favor de la cooperación, con 53 y 51 por ciento en marzo y abril de ese año.
La encuesta publicada ayer agregó algunos elementos más que confirman este endurecimiento: una mayoría de 62 por ciento está en desacuerdo con emplear fuerzas militares de Estados Unidos para combatir a grupos criminales en México; 32 por ciento sí está de acuerdo.
Además, 68 por ciento calificó como mal o muy mal que el gobierno de Estados Unidos califique como “grupos terroristas internacionales” a los cárteles de la droga en México; 26 por ciento lo vio bien o muy bien.
Estas mayorías en contra, más que una postura de política pública y de preocupación por la inseguridad, parecen ser un rechazo abierto a Donald Trump y a su tono amenazante.
Quizás por ello, la opinión pública mexicana ha cerrado filas en torno a la presidenta Sheinbaum, quien obtuvo 81 por ciento de aprobación en el mes de enero.
Hay que destacar que el rechazo a la cooperación con el gobierno de Donald Trump cruza las líneas partidarias en el país: según el sondeo, la postura de defender la soberanía y no dejar que el país vecino se meta registró 77, 73 y 64 por ciento entre morenistas, apartidistas y oposicionistas, respectivamente.
Las posturas actuales de rechazo a la cooperación con Estados Unidos también se extienden a los lazos familiares y económicos en ambos lados de la frontera.
Según el sondeo, 66 por ciento de quienes no tienen familiares en EU prefiere la defensa de la soberanía sobre la cooperación; entre quienes tienen familiares allá, el porcentaje aumenta a 84 por ciento, y entre quienes reciben dinero de sus familiares, es 86 por ciento.
Los lazos familiares, que por lo general acercan a México con el país vecino, ahora no parecen ser un factor de unión. Como comentaba aquí en este espacio hace algunas semanas, Trump polariza, unificando a la opinión pública mexicana en su contra.