Su valor le salvó la vida. Luego de recibir una bala perdida durante un tiroteo en la Ciudad de México, lo primero que a Jorge Rivas le pasó por la cabeza es que iba a morir desangrado, pero reaccionó rápido, rasgó su pantalón y se hizo un torniquete. “Yo dije: ‘ni madres, no me quiero morir’”.
Hasta hace unas días, Jorge llevaba una vida normal como jefe de departamento en un call center. Pero el 11 de febrero todo cambió. Al caminar por calles de la colonia Narvarte, alcaldía Benito Juárez, fue alcanzado por una bala.
“Iba por Universidad, estaba llegando a una crepería donde me quedé de ver con una amiga, y de pronto se escuchó ‘pa pa pa’, volteo y veo correr a todos”, narró a El Financiero el joven de 31 años.
Enseguida se dio cuenta de que no eran cohetes, sino disparos. “Corrí también para esconderme, pero sentí muy caliente mi pierna y al revisar mi pantalón estaba completamente manchado de sangre”.
El origen de la balacera fue un taller de motocicletas. Hasta ese lugar llegó un hombre y disparó contra las tres personas que en ese momento estaban ahí, una falleció y dos más resultaron heridas.
A unos metros, Jorge fue atendido de una polifractura en la rodilla que, ya en el hospital, le causó una trombosis en la extremidad inferior derecha, lo que derivó en la amputación de su pierna. Ahora debe aprender a vivir una nueva realidad.
Lo que aquel 11 de febrero había iniciado para Jorge como un día normal, concluyó con la incertidumbre total para este hombre que terminó el día en una cama de hospital.
Jorge sabe que, aunque logró salvar la vida, hubo posible negligencia por parte del personal médico del hospital Magdalena de las Salinas del IMSS, que fue lo que le provocó la pérdida de su extremidad.
Además, reconoce indiferencia de autoridades capitalinas que no lo han buscado y desde el primer momento le dieron un trato de delincuente. Ni siquiera pagaron la cuenta de un hospital privado a donde originalmente lo habían llevado, fueron más de 20 mil pesos que pagó su familia.
Sin embargo, por ahora prefiere concentrarse en su recuperación. “Me encuentro en el proceso de recuperación y adaptación a esta nueva realidad”, indicó al advertir que será un proceso largo y costoso.
Por ello, inició la recaudación de fondos que le permitan cubrir los gastos médicos y comprar una prótesis. La campaña de donación es en la plataforma GoFundMe, bajo el título “prótesis de pierna y gastos médicos para Jorge Rivas”.