Al cierre de 2024, las tres mayores empresas de telecomunicaciones móviles que operan en México acumularon ingresos por 358 mil 45 millones de pesos, un crecimiento de apenas 4 por ciento respecto al año anterior, la cifra más baja posterior a la pandemia de Covid-19, cuando empresas como América Móvil, AT&T y Telefónica Movistar se vieron altamente beneficiadas por la necesidad de conectividad de las empresas y los usuarios finales.
El menor crecimiento de los operadores móviles tradicionales fue el resultado de las presiones que tuvieron a lo largo del año pasado por las tarifas agresivas de los Operadores Móviles Virtuales (OMV) como Bait, Mega Móvil, MexFon y Diri, entre otras 130 compañías que corren sus servicios a través de la Red Compartida de Altán Redes.
El operador móvil tradicional más golpeado por esta situación fue Telefónica Movistar, que hasta el cuarto trimestre del 2024 registró una caída de 5.2 por ciento en sus ingresos por servicios y una reducción de 29.3 por ciento en sus ingresos correspondientes a la venta de equipos.
De hecho, la participación de mercado de la empresa de origen español ha venido a la baja, al pasar de 20.9 por ciento de cuota de mercado en las líneas móviles en 2020 a 13.8 por ciento al cierre de 2024, con aproximadamente 20 millones de usuarios de prepago y pospago.
Por su parte, Telcel, propiedad del empresario mexicano Carlos Slim, registró ingresos por 332 mil 24 millones de pesos, un aumento de apenas 2.3 por ciento anual. Sin embargo, la empresa de telecomunicaciones continuó con su tendencia de disminución de usuarios (1.2 por ciento) ante la imposibilidad de una estrategia de aumento en pospago y prepago de alto consumo.
En tanto, AT&T, dirigida en México por Mónica Aspe, ha sido la menos golpeada por la desaceleración de las telecomunicaciones en México, ya que al cierre de 2024 alcanzó ingresos por 19 mil 105 millones de pesos, es decir un crecimiento de 4.3 por ciento anual.
“AT&T no mostró cambios significativos en el último año, prácticamente es el que ha mostrado el mejor desempeño entre los operadores tradicionales. Continúa con resultados positivos al registrar un aumento de 3.7 por ciento en sus ingresos por servicio y un crecimiento significativo en ingresos por equipos (11.8 por ciento) ante estrategia de financiamiento y subsidios para reducción de desconexiones”, señaló Carlos Herández, director de Análisis en la Consultora The CIU.
Ofertas agresivas de OMVs impactan a los operadores
La desaceleración en las ganancias de los operadores móviles tradicionales se debe en buena medida a las ofertas de internet y datos móviles tan agresivas que los Operadores Móviles Virtuales (OMVs) que corren a través de la Red Compartida de Altán Redes ofrecen a las empresas y los usuarios mexicanos.
“A lo largo del año anterior, se estima que ocho de cada 10 adiciones netas en el segmento de telecomunicaciones móviles fue absorbida por el segmento de Operadores Móviles Virtuales, lo que le permitió tener un crecimiento de 59.7 por ciento en el número de líneas de prepago y pospago”, señaló el analista de The CIU.
De hecho, esta es la primera vez que los OMV se posicionan en la tercera posición en participación del mercado móvil, con el 14.9 por ciento de cuota de mercado en México, superando a Telefónica Movistar y apenas 0.6 puntos porcentuales debajo de la participación de mercado que tiene la estadounidense AT&T.
“Durante 2024 ante tarifas agresivas, esfuerzo publicitario y esquemas de lealtad, los OMV registraron un crecimiento muy dinámico, con 7 por ciento de los ingresos del mercado de telefonía móvil, un crecimiento de 2 por ciento respecto a 2023 que estuvo apalancado por un mayor gasto promedio de sus usuarios empresariales y usuarios finales”,reveló el estudio Sector de Telecomunicaciones en México al 2024.
Desaceleran inversiones de los grandes operadores en México
Los gigantes de las telecomunicaciones fijas en México también se vieron impactados debido a que la inversión combinada de Izzi Telecom, Megacable, Telmex y TotalPlay para el año pasado se ubicó en 38 mil 449 millones de pesos, apenas 0.7 por ciento mayor que la del 2023.
El conjunto de desembolso de estas cuatro compañías –que atienden a cerca de 55 millones de accesos entre telefonía fija, banda ancha y televisión de paga en cuando menos 25 millones de hogares en México– quedó 23.71 por ciento por debajo de la marca de los 50 mil 268 millones de pesos que invirtieron en 2020, la inversión más alta del último lustro.
Según el estudio Unidades generadoras de ingreso en servicios fijos y TV restringida, elaborado por la Consultora The CIU, la baja en las inversiones para el despliegue de nueva infraestructura es producto de una caída de 4.8 por ciento en los ingresos de la Televisión de Paga.
“Los usuarios cancelaron el servicio a los 5.8 meses en promedio de haberlo contratado y del total, 61 por ciento no lo volverían a contratar porque es caro, no les gustó la programación o simplemente porque prefieren el contenido que ofrecen las plataformas de streaming”, señala el estudio, el cual anticipó que la caída continuará durante 2025.