La Universidad de Columbia debe tomar una serie de “próximos pasos críticos” si quiere restaurar 400 millones de dólares en fondos federales, dijo la administración de Donald Trump en una carta a la escuela, según The Free Press.
La Casa Blanca ordenó a principios de este mes recortes en las subvenciones y contratos federales a la universidad de la Ivy League, alegando quejas de antisemitismo por parte de estudiantes judíos, y ha advertido a otras instituciones que podrían ser las siguientes.
Las demandas surgen tras una serie de protestas pro-palestinas que han sacudido el campus de Columbia en la ciudad de Nueva York desde el ataque de Hamás contra Israel el 7 de octubre de 2023.}
¿Qué pide el Gobierno de Trump para financiar de nuevo a Columbia?
Según la carta, los mandatos incluyen instituir una prohibición de uso de mascarillas en todo el campus; adoptar una definición específica de antisemitismo; colocar al Departamento de Estudios de Medio Oriente, Asia Meridional y África bajo administración académica por un mínimo de cinco años; y revisar las políticas de reclutamiento internacional, así como las admisiones de pregrado y posgrado.
Columbia no respondió a las solicitudes de comentarios fuera del horario comercial habitual.
La escuela ahora enfrenta la crítica decisión de cumplir con los mandatos federales para recuperar su financiación o desafiar las directivas del gobierno, una elección que podría afectar significativamente su autonomía administrativa y el clima del campus en los próximos años.
Agentes federales también arrestaron recientemente a Mahmoud Khalil, destacado activista pro-palestino y exalumno de Columbia. Su equipo legal ha criticado la detención de Khalil como un acto con motivaciones políticas que vulnera sus derechos amparados por la Primera Enmienda.
¿Qué pasó en la Universidad de Columbia?
En abril del 2024, un grupo de estudiantes propalestinos tomó por la fuerza su emblemático edificio Hamilton Hall, y lo vandalizó.
“Ayer (lunes) dejamos muy claro que el trabajo de la Universidad no puede verse interrumpido sin cesar por manifestantes que violan las normas. Seguir haciéndolo tendrá consecuencias claras: los estudiantes que ocuparon el edificio se enfrentan a la expulsión”, indicó el portavoz de la oficina de Asuntos Públicos de la Universidad de Columbia, Ben Chang, en un comunicado.
Y añadió: “Se trata de responder a las acciones de los manifestantes, no a su causa”. No obstante, el centro de estudios alega que estos jóvenes defensores de la causa palestina están creando “un entorno amenazador” para muchos de sus compañeros y profesores judíos.