Francia vuelve a ‘la carga’ contra Estados Unidos… y esta vez no es por la Estatua de la Libertad: El país pidió a la Unión Europea considere aplicar la medida de represalia más poderosa de que dispone por primera vez en la historia si el presidente Donald Trump utiliza los aranceles para obligar injustamente al bloque a realizar cambios a sus políticas.
Trump planea imponer amplios aranceles a sus socios globales a partir del 2 de abril. El presidente de EU ha dicho que las tarifas rectificarán las barreras no arancelarias que, según él, son injustas, como las regulaciones nacionales y la forma en que los países recaudan impuestos, incluido el impuesto sobre el valor agregado de la UE.
La UE afirma que su IVA es un impuesto justo y no discriminatorio que se aplica por igual a los bienes nacionales e importados.
Esta es la ‘poderosa’ medida comercial que Francia exige se aplique a EU
Francia se ha unido a un pequeño grupo de países de la UE que cree que el llamado instrumento contra la coerción —una herramienta diseñada para contraatacar a las naciones que usan medidas comerciales y económicas de manera coercitiva— debería estar sobre la mesa, según fuentes con conocimiento directo, aunque no sea el curso de acción preferido, señaló una de las personas.
El instrumento contra la coerción, que está sujeto a una serie de condiciones y pasos, permitiría a la UE desplegar una amplia gama de respuestas de represalia, incluidas restricciones al comercio y los servicios, así como a ciertos derechos de propiedad intelectual; la inversión extranjera directa, y el acceso a la contratación pública.
¿Qué aranceles aplicó Trump a la Unión Europea?
Trump intensificó la guerra comercial global en marzo al imponer un arancel de 25 por ciento a las importaciones de acero y aluminio, lo que llevó a la UE a anunciar sus propias tarifas de represalia sobre productos estadounidenses políticamente sensibles por un valor de hasta 26 mil millones de euros (28 mil 100 millones de dólares).
Los inminentes aranceles recíprocos, que serían específicos para cada socio comercial para compensar cualquier desventaja percibida para las empresas estadounidenses, podrían eclipsar los impuestos a esos metales.
La Comisión Europea, el brazo ejecutivo de la UE que se encarga de los asuntos comerciales del bloque, no está considerando actualmente el instrumento contra la coerción, según señaló otra fuente, que habló bajo condición de anonimato.
Otra persona apuntó que cualquier discusión sobre el uso de la herramienta era lejana, ya que la UE primero necesitaba ver qué aranceles anunciará Donald Trump el 2 de abril y si el instrumento contra la coerción es aplicable.
Maros Sefcovic, jefe de comercio de la UE, señaló el miércoles 19 de marzo que no tiene detalles sobre los nuevos aranceles de EU y que la comisión tendrá que continuar los preparativos y mantener un enfoque flexible.
Debido a eso, no se espera que la UE establezca inmediatamente su respuesta a las próximas medidas de Trump tan rápido como lo hizo con la disputa de los metales, aclaró una de las fuentes.
Sefcovic también anunció que la respuesta del bloque a los aranceles sobre los metales se pospondrá hasta mediados de abril, una medida que daría más tiempo para negociar con EU.
¿Cómo nació el instrumento de la coerción, el ‘arma de último recurso’ de la UE?
El instrumento contra la coerción se diseñó principalmente para disuadir y, si fuera necesario, responder a acciones coercitivas deliberadas de terceros países que utilizan medidas comerciales como medio para presionar las decisiones políticas soberanas del bloque o de los Estados miembros individuales. Las contramedidas están previstas para ser utilizadas únicamente como último recurso y deben ser proporcionales al nivel de perjuicio.
El instrumento se promulgó como parte del esfuerzo de la UE por reforzar sus defensas comerciales después de que EU impuso aranceles a las exportaciones del bloque durante la primera administración de Trump. Otro factor fue la decisión de China de imponer restricciones a los productos lituanos después de que Taiwán abriera una oficina comercial en la nación báltica.
La comisión puede proponer el uso de la herramienta, pero corresponde a los Estados miembros determinar si existe un caso de coerción y si debe aplicarse.