Los estadounidenses adinerados y los inversores empresariales se encuentran entre los grandes beneficiarios del proyecto de ley fiscal de los republicanos en la Cámara de Representantes, mientras que los inmigrantes y las universidades de élite, blanco de la ira del presidente Donald Trump, se han visto muy afectados.
Es probable que el plan tributario sufra cambios significativos a medida que avance en la Cámara y luego en el Senado. Sin embargo, los borradores de las comisiones publicados esta semana han establecido los objetivos iniciales.
A continuación, los ganadores y los perdedores, hasta ahora, en la batalla fiscal.
Ganadores
Estos son los sectores beneficiados por el plan tributario de Donald Trump:
Multimillonarios
Los ricos eludirían un aumento de impuestos y obtendrían la posibilidad de transferir más riqueza a sus herederos en el proyecto de ley aprobado el miércoles por la mañana por la comisión de Hacienda de la Cámara de Representantes.
Los republicanos omitieron una propuesta de Trump para aumentar la tasa del impuesto sobre la renta del 37 al 39.6 por ciento para las personas con ingresos muy altos. En cambio, las familias ricas obtienen otra rebaja fiscal: la exención del impuesto sobre el patrimonio aumentará a 15 millones para las personas físicas y a 30 millones para los matrimonios el año que viene, y aumentará con la inflación a partir de entonces. Además, los recortes fiscales de Trump se convertirían en permanentes.
Propietarios de pequeñas empresas
La deducción fiscal para empresas pasaría del 20 al 23 por ciento y se ampliaría el alcance de quienes pueden acogerse. La medida beneficiaría a propietarios de negocios unipersonales, sociedades de responsabilidad limitada y sociedades colectivas.
Capital privado
La desgravación fiscal sobre los intereses devengados que beneficia al capital privado, al capital riesgo y a las sociedades inmobiliarias volvería a mantenerse, a pesar de la presión del presidente para eliminarla. El capital privado también consiguió una ampliación de la desgravación fiscal por gastos de intereses.
Concesionarios de automóviles nacionales
Hasta 10 mil dólares al año en intereses de préstamos para autos fabricados en Estados Unidos serían deducibles hasta 2028. El beneficio se eliminaría gradualmente para quienes ganen más de 100 mil dólares (o 200 mil por pareja). Se estima menores ingresos fiscales de 57 mil millones.
Fabricantes
El plan reviviría deducciones para depreciación acelerada y para investigación y desarrollo, respaldadas por la Asociación Nacional de Fabricantes. Serían exenciones temporales.
Ancianos y trabajadores que reciben propinas
Los mayores de 65 años obtendrían una deducción estándar más alta. Además, propinas y horas extras quedarían exentas del impuesto sobre la renta hasta 2028.
Padres
La deducción por hijos subiría de 2 mil a 2 mil 500 dólares hasta 2028. Los nuevos padres podrían abrir cuentas “MAGA” con un aporte inicial de mil dólares del Gobierno.
Empresas
Se rechazaron en su mayoría otras propuestas de alzas de impuestos y que habrían afectado a las grandes empresas, como el aumento del impuesto sobre la recompra de acciones o la limitación de las deducciones estatales y locales.
Contratistas de defensa
Se destinarían 150 mil millones adicionales a defensa, con grandes contratos esperados para nuevos sistemas armamentísticos.
Perdedores
Estos serían los sectores más afectados con el plan de impuestos de Donald Trump.
Estadounidenses con bajos ingresos
Parte del costo de la ley tributaria se cubrirá con recortes a la cobertura de Medicaid y a los cupones de alimentos, ambos destinados a personas de bajos ingresos. Los republicanos quieren imponer requisitos laborales a los beneficiarios de Medicaid sanos de hasta 64 años.
También proponen recortes al Programa de Asistencia Nutricional Suplementaria. Esto incluye ampliar los requisitos laborales para cubrir a más beneficiarios. A partir de 2028, los estados también tendrían que pagar una parte de los costos de los beneficios alimentarios, ahora pagados por el gobierno federal.
Residentes de estados con impuestos altos
Legisladores de estados con impuestos altos, como Nueva York, Nueva Jersey y California, presionaron para que se aumentara el límite de la deducción por impuestos estatales y locales, creada para ayudar a financiar la ley fiscal de Trump de 2017. Sin embargo, el plan de los representantes republicanos de aumentar el límite de 10 mil a 30 mil quedó muy lejos de las demandas.
Las negociaciones siguen en curso. El límite expiraría por completo a finales de año sin una nueva legislación y, debido a la escasa mayoría republicana, solo unos pocos legisladores de estados con impuestos elevados podrían bloquear el proyecto si se abstienen de votar, como han amenazado con hacer.
Energías renovables
Se revertirían incentivos clave de la ley climática de Joe Biden. Se eliminarían gradualmente deducciones para paneles solares, energía eólica, nuclear e hidrógeno.
Fabricantes de vehículos eléctricos
Empresas como Tesla y GM perderían la deducción de hasta 7 mil 500 por compra de vehículos eléctricos, tanto nuevos como usados y comerciales.
Universidades de élite
Instituciones privadas con fondos de patrimonio superiores a 2 millones de dólares por alumno pagarían una tasa del 21 por ciento sobre ingresos por inversiones (antes era de 1.4 por ciento). Eso incluye a universidades coomo Harvard, Tale, Stanford y el MIT. Las universidades con dotaciones entre 750 mil y 2 millones de dólares pagarían tasas del 7 al 14 por ciento. Las religiosas quedarían exentas.
Fundaciones privadas
Se aplicaría un impuesto progresivo: 2.78 por ciento para fundaciones con entre 50 millones y 250 millones de dólares; 5 por ciento hasta 5 mil millones; y 10 por ciento para las con más de eso, como la Fundación Gates.
Inmigrantes
Se impondría un nuevo impuesto del 5 por ciento sobre remesas al extranjero. También se restringiría el acceso a créditos fiscales para cobertura médica a inmigrantes con asilo o estatus de protección temporal.