Banderas de gran tamaño de tres países dominan la oficina de Oscar Del Cueto Cuevas en la Ciudad de México: una de Estados Unidos, otra de México y la última de Canadá.
Para el presidente de las operaciones en México de Canadian Pacific Kansas City, las banderas son un símbolo de la apuesta de 31 mil millones de dólares de CPKC en una economía norteamericana profundamente entrelazada, que parece estar dando frutos frente a la guerra arancelaria del presidente Donald Trump.
En marzo, ante las crecientes amenazas de Trump de imponer nuevos aranceles a las importaciones mexicanas y canadienses, Del Cueto se mantuvo impasible. “Nuestra postura es que continuaremos con nuestras inversiones”, declaró entonces. “Este asunto no las detendrá”.
Un mes después, luego de que Trump excluyera a México de la última ronda de aranceles de represalia, Del Cueto parece haber demostrado tener razón, y no es el único.
¿Qué tipo de empresas están ‘volteando a ver’ hacia México?
En lugar de retirarse, las principales empresas de logística y transporte están redoblando sus esfuerzos hacia México.
Incluso con los riesgos políticos y las dificultades económicas, el vecino del sur de Estados Unidos sigue siendo un eslabón crucial en la cadena de suministro de América del Norte.
DHL acaba de finalizar una expansión de 120 millones de dólares en su centro de distribución aérea de Querétaro, según un representante de la compañía, lo que lo convierte en el mayor centro de envíos de DHL Express en Latinoamérica.
CPKC está lanzando un servicio de tren refrigerado para transportar productos agrícolas al norte y proteínas al sur.
La empresa estadounidense de gestión de carga ECHO Global Logistics inauguró su nueva sede en Ciudad de México en marzo, con planes de duplicar su volumen de envíos transfronterizos.
“Creo que veremos un mayor crecimiento en el comercio regional, a pesar de los primeros indicios de que esto tendría un impacto negativo para México y Canadá”, declaró Troy Ryley, presidente de ECHO en México, en referencia a los aranceles estadounidenses. “No estamos reduciendo la velocidad. En todo caso, las conversaciones se centran más en cómo podemos acelerar el crecimiento”.
Consecuencias para México por los aranceles de Trump
El regreso de Trump a la política arancelaria ha sacudido los mercados globales, pero México disfruta de una exención poco común, al menos por ahora.
A principios de este mes, Estados Unidos mantuvo los aranceles de 25 por ciento que excluye por completo los bienes comercializados bajo el Tratado entre Estados Unidos, México y Canadá (T-MEC).
Un arancel automotriz independiente del 25 por ciento permanece vigente, aunque solo aplica a las partes de automóviles fabricados en el extranjero y enviados bajo el T-MEC.
Los mercados respondieron con rapidez. El peso mexicano se fortaleció tras el anuncio y la bolsa de valores de México alcanzó su nivel más alto desde julio.
Estrategas de HSBC, entre ellos Alastair Pinder, señalaron en una nota del 9 de abril que el aumento de los aranceles estadounidenses en otros países hace de México un destino de inversión aún más atractivo.
Pero el crecimiento se ve atenuado por desafíos más amplios. El banco central de México está considerando la posibilidad de una recesión y, según el escenario base, prevé que la economía crecerá apenas un 0.6 por ciento en 2025.