Luego de más de una semana de que colectivos buscadores encontraran fosas y crematorios clandestinos en el rancho Izaguirre, en la comunidad de La Estanzuela, el presidente municipal de Teuchitlán ha dicho que está dispuesto a declarar lo que sabe sobre el caso.
José Asunción Murguía Santiago, del partido Movimiento Ciudadano (MC), es edil de Teuchitlán, el nuevo “centro del terror” luego de los recientes hallazgos en el rancho Izaguirre.
El 12 de marzo, dio una entrevista al Canal 13 Guadalajara, donde explicó que la Fiscalía de Jalisco tiene el caso y las investigaciones le corresponden a dicha autoridad.
Al ser cuestionado sobre si tenía previamente información sobre lo que pasaba en el rancho, Murguía dijo que el predio está a las orillas del poblado y que hay cañaverales ahí.
“Es algo de no creerse lo que está pasando en Teuchitlán. Pero nosotros creemos que con las investigaciones que está haciendo ahorita el Fiscal, con la gente de Semefo, vamos a tener resultados”, apuntó.
También aseguró que no tenían información sobre lo que ocurría en ese lugar y consideró que quizá, al ser Teuchitlán un pueblo tranquilo, fue usado para llevar a cabo este tipo de actividades ilícitas.
Luego de que el fiscal general de la República, Alejandro Gertz Manero, declarara que no era posible que las autoridades locales de Jalisco no supieran lo que pasaba, el alcalde de Teuchitlán dijo que “si nos unimos todos, sacamos este caso más rápido, no nos echemos la bolita”.
En otra entrevista, el alcalde José Murguía Santiago dijo que él está limpio y dispuesto a declarar lo que sabe, y señaló que el caso es responsabilidad del Estado y de la Federación.
“Yo creo que esos, esos sucesos pues les tocan realmente al Estado, al Estado y a la Federación, también lo que es desde la Fiscalía, lo que es Sedena, lo que son Guardia Nacional, nosotros como municipio pues tenemos pocos elementos, no podemos ponernos al tú por tú con esa gente”, dijo el mandatario municipal en entrevista con Joaquín López Dóriga.
Asimismo, hizo un llamado a que el caso del rancho Izaguirre sea investigado “desde arriba”, luego de que hubiera señalamientos por parte de colectivos buscadores a los policías municipales y la posible complicidad con grupos criminales.
José Asunción Murguía también expresó su preocupación de que este hecho violento pueda perjudicar la economía local si decae el turismo, pues en Teuchitlán se encuentra la zona arqueológica de los Guachimontones y un balneario.
¿Qué sabemos sobre el rancho de Teuchitlán, donde colectivos hallaron crematorios?
El colectivo Guerreros Buscadores de Jalisco encontró hornos crematorios clandestinos, así como ropa, calzado y algunos restos óseos en el predio del rancho Izaguirre, ubicado en el municipio de Teuchitlán, en una misión de búsqueda el pasado 5 de marzo.
Este rancho había sido previamente investigado por la Fiscalía de Jalisco y otras autoridades el 20 de septiembre de 2024, cuando fueron detenidas 10 personas en el lugar. En el cateo no fue encontrado nada más; autoridades locales han referido que el predio “era muy grande”.
Fue hasta marzo de este año que el colectivo recibió información de un sobreviviente de este centro de adiestramiento criminal. En llamadas anónimas, el grupo de buscadores fue informado sobre la existencia de fosas clandestinas en el rancho.
La presidenta mexicana Claudia Sheinbaum confirmó el 12 de marzo que la Fiscalía General de la República (FGR) atrajo el caso de Teuchitlán para investigarlo, esto luego de que el fiscal Alejandro Gertz Manero declarara que no era creíble que una situación de este tipo no fuera conocida por autoridades municipales y estatales.
El rancho Izaguirre se ubica en la comunidad de La Estanzuela, Teuchitlán, y era usado como un campo de adiestramiento de grupos criminales. Presuntamente, sería del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), de acuerdo con testimonios. Los buscadores refieren que los jóvenes eran atraídos con engaños, con ofertas de empleo falsas y luego eran secuestrados en la terminal de autobuses para ser llevados allí. A esto se le llama reclutamiento forzado.
Después del entrenamiento criminal en Teuchitlán, los jóvenes eran enviados al ‘frente de batalla’ en Zacatecas o Michoacán.
Con información de Quadratín y Canal 13 Guadalajara.