Pese a los entornos complicados que se viven a nivel interno y externo, es necesario que se promueva a México en el extranjero para atraer inversiones y ahí el trabajo del sector público y privado deben unirse y prepararse para la etapa que viene tras la alta volatilidad generada por las políticas de Estados Unidos.
Para Julio Escandón, director general de Banco Base, aquellas empresas que por la coyuntura adversa retiren sus inversiones del país cometerán un grave error y les costará mucho trabajo recuperarse después de que se supere el escenario adverso, porque van a perder competitividad. En cambio, las compañías que se preparen ahora, tendrán más ventajas, auguró.
“No por ser optimista, pero siendo realista, creo que en el mediano plazo, cuando las cosas se asienten y se sienten a platicar para la renegociación del T-MEC, a las tres partes les conviene llegar a acuerdos, vamos a empezar a ver otra vez estos flujos de inversión”, aseguró el directivo en entrevista.
En el marco de la 88 Convención Bancaria, Escandón afirmó que hay mucho interés de realizar inversiones extranjeras en el país, pero están a la espera de mayor claridad en el panorama. De ahí la importancia de dar a conocer el ambiente de negocios de forma internacional para disminuir la incertidumbre.
Al respecto, argumentó que “el mercado no es tonto. Al contrario, el mercado es el que manda y el mercado sabe. Y las inversiones que hacen los inversionistas no son de cuatro años o de seis años. No son en términos de la estancia de los presidentes, sino más bien en términos de 20, 30, 50 años”.
Pese a cualquier circunstancia, México seguirá al lado de Estados Unidos y, sin duda, están las condiciones para que haya una integración comercial con este país. De ahí que, sugirió, sea importante adelantar la renegociación del T-MEC prevista para 2026, a fin de aliviar ambigüedades referentes a la relación con la nación estadounidense.
Sin embargo, para el director general de Banco Base existe el riesgo de desenfocar lo que ya se realizaba para potencializar la atracción de inversiones por medio del nearshoring por atender temas inmediatos. Esto provocaría que se descuide la mejora de la infraestructura, sobre todo en energía, agua y carreteras.
“Y cuando venga esta oleada de nuevo de inversiones extranjeras sigamos con los temas pendientes. Esto sí puede detener estas inversiones de 50, 100 años que traen los grandes corporativos internacionales. Van a decir ‘oye en otro lugar de Latinoamérica me dan incentivos fiscales y tienen la infraestructura suficiente, mejor me voy allá con todo y tú tratado de libre comercio’. Ese es el riesgo principal a largo plazo”, manifestó el banquero.
Por lo anterior, estimó que hay mucho que hacer con el Plan México a nivel interno y sugirió, tanto al gobierno como el sector privado, a que se atienda la deuda en infraestructura que se tiene, porque “nos puede salir cara en costo de oportunidad de las inversiones que estoy seguro que van a venir en algún momento”.
A la par de lo anterior, un menor dinamismo económico por la incertidumbre ha impactado la colocación de crédito, ya que las empresas prefieren esperar a conocer las reglas del juego de forma muy clara para buscar su expansión. Consideró que podría mejorar esta situación hacia el segundo semestre del año.
Confianza en México
Banco Base sigue con sus planes en el país y muestra de esto es que tiene contemplado hacer una inversión de dos mil millones de pesos para los próximos cinco años a fin de mejorar su oferta de producto, enfocada en transferencias internacionales y productos de financiamiento especializado para impulsar los negocios globales de empresas dedicadas al comercio exterior.
“Hoy en día somos muy competitivos. Lo que estamos visualizando para los próximos años es no nada más seguir con esta ventaja de agilidad, sino hacerle la vida todavía más sencilla a los clientes a través de procesos digitales inmediatos y al mismo tiempo que estén asesorados y sepan que hay una persona que lo puede atender en cualquier duda que tenga”.
El directivo añadió que el esquema híbrido es su apuesta y de ahí la importancia de invertir en la banca electrónica para que sea sencilla y amigable con sus usuarios, así como un modelo de ser complementarios mediante alianzas con intermediarios financieros no bancarios para ofrecer el servicio de divisas y pagos internacionales.
“Algunos bancos en México lo que han hecho son spin-offs o tener otro banco con esas características. Nuestra visión no va por ahí, es ser complementarios con empresas de tecnología. Es ganar-ganar, sobre todo para los clientes finales que tendrán un servicio con la agilidad que nosotros proveemos”, apuntó.