2025 es un año decisivo en la recuperación del mercado de oficinas en los principales mercados del país, pero no será sencillo.
La optimización del portafolio, el ahorro en el costo de los espacios y el incremento en el uso de las oficinas son factores decisivos de la esperada recuperación en el mercado.
Al menos es lo que concluye el sondeo Global Workplace & Occupancy Insights, que aplicó CBRE a distintos y grandes usuarios de espacio corporativo, como un reflejo de lo que depara el mercado en México.
Es una realidad que enfrenta un mercado donde menos de un tercio de los espacios han sido rediseñados, luego de que los empleados pasan sólo 59 por ciento del tiempo y desde una encuesta de Gensler requerirían aumentarlo a 67 por ciento para maximizar su productividad.
El dilema se centra en la experiencia de trabajo como el eje central de la propuesta de valor para hacer frente a desafíos como la falta de conexión y el sentido de pertenencia acentuados por el trabajo remoto e híbrido.
Se trata de aspectos importantes que llevan a la industria a repensar su impacto de cara a una recuperación, que permitiera el inicio de un nuevo ciclo con inversiones, luego de el negocio aún mantiene un nivel de disponibilidad promedio de 22 por ciento en Ciudad de México (CDMX) con un inventario de más de 8 millones de m2.
Los insights de la encuesta demuestran cómo las organizaciones probarán la efectividad del espacio de trabajo y sus políticas con colaboradores, según reconoció 96 por ciento de las empresas que integraron a su operación estos aspectos.
Es también cómo lograrán integrar lugares de trabajo eficaces programas híbridos estratégicos, cuya adopción ha sido más del 30 por ciento en los últimos cuatro años.
Desde 2024, el 92 por ciento de este universo de empresas encuestadas reconoció utilizarlos, pero más allá de ello justo son las características de las políticas híbridas más populares abren expectativas de liderazgo frente a comportamientos de los empleados en el regreso, cómo afectan los mandatos frente al incentivo que representa su adopción y su impacto en las políticas en la retención del talento.
Lo que medirán las empresas para validar la eficacia del trabajo híbrido se enfoca en la medición de las tasas de ocupación en un 85 por ciento de los casos integrados a la encuesta, el uso en 76 por ciento y en proporciones menores la tasa de asistencia y disponibilidad.
Estos cambios han representado cambios importantes en la huella tradicional de las empresas. El análisis determina cómo se ha generado en los últimos años una reducción del 10 por ciento en el espacio por persona respecto a un efecto de hasta 30 por ciento menos en el espacio por persona en nuevas construcciones específicas para cada ubicación dado que en la proyección se mide el espacio presente y futuro en crecimiento.
Es un tema que no debiera ignorarse, dado que permite visualizar un cambio evidente en el hábito del uso de los espacios y otros factores que han generado cambios en la demanda y tipo de espacios.
Incluso a raíz de su existencia en las formas de trabajo, la preferencia de una mayor participación de la oficina física en los formatos híbridos están a la cabeza de las preferencias.
Así que no se trata de un adiós a las oficinas, sino a una nueva forma que integra factores que le dan un nuevo aire, donde tendencias como la creación de comunidades o distritos, están siendo la luz al final del túnel que empieza a ver un negocio que varias veces ha sido importante en los ciclos de inversión y expansiones.