Proveedores, fabricantes y representantes de la industria automotriz y de autopartes, esperan que durante la próxima revisión del Tratado Comercial México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) se incremente en hasta 10 puntos porcentuales el contenido regional de la reglas de origen en todas las categorías que deben cumplir los autos.
Actualmente el T-MEC pide el cumplimiento del valor de contenido regional de piezas para automóviles del 75 por ciento, en partes principales un 70 por ciento y en las complementarias un 65 por ciento, por lo que el aumento más alto por vehículo sería de 85 por ciento de contenido regional.
“¿Qué es lo que se espera en esta revisión? Es que el valor de contenido regional para los vehículos se aumente a 85 por ciento, en el caso de las autopartes estamos esperando que se incremente un 10 por ciento por cada una de las categorías”, aseguró Alberto Bustamante, presidente de la Asociación Nacional de Proveedores del Sector Automotriz (Anapsa), ante representantes de la industria.
Detalló que, aunque la industria espera que a partir del segundo semestre cesen las ofensivas arancelarias del gobierno de EU a la industria, el sector se alista para la revisión del T-MEC, que podría traer cambios importantes a las cadenas de suministro.
“Incluso existe la posibilidad que se incluya una nueva regla sobre el valor de contenido nacional estadounidense”, dijo.
Destacó que México a su vez busca elevar su valor de contenido nacional entre un 10 y 15 por ciento con el Plan México, atrayendo inversiones que puedan dar soporte a los cambios que se avecinan.
“Estamos hablando de entre 5 mil millones de dólares y 10 mil millones de dólares que se tendrían que realizar en cuanto a inversiones”, agregó Alberto Bustamante.
Por otro lado, la exención de aranceles a autos fabricados bajo el T-MEC y a autopartes, le han dado un alivio a la industria. Sin embargo, actualmente alrededor del 20 por ciento de autopartes que se exportan a EU están fuera del tratado, en su mayoría refacciones y en el caso de vehículos es de alrededor del 8 por ciento de las exportaciones.
“Actualmente las autopartes están exentas de este arancel, sólo las que no están bajo el T-MEC, estamos hablando de que al día de hoy el 92 por ciento de las autopartes de las empresas de autopartes que están establecidas en México cumple con las reglas del T-MEC. Tenemos un porcentaje muy bajo de empresas que por la especialización de la importación de partes y componentes, continúan pagando el arancel del 25 por ciento más el de Nación Más Favorecida”, comentó a parte Gabriel Padilla, director general de la Industria Nacional de Autopartes (INA).
Ambas organizaciones, tanto la Anapsa como la INA, han echado a andar programas de fortalecimiento en las cadenas de suministro, para apoyar a proveedores a elevar su contenido en el país, lo cual podría representar inversiones por arriba de los 33 mil millones de dólares y apoyo financiero del IFC.
Renegociación del T-MEC, junto a Plan ‘B’
Lograr una renegociación justa para los países del T-MEC será clave para fortalecer a la región en su cadena de suministro, sin embargo México debe apostar por su “Plan B” para empezar a crear sus propios vehículos hechos en el país para el consumo interno y reducir las dependencias económicas, consideraron expertos.
“El plan A, por supuesto que es la integración económica en Norteamérica y seguir abasteciendo de producto, pero yo creo que el plan B ya está un poco delineado con el plan México. El plan B es también enfocarse a la producción hacia México, para México, porque si no tenemos un plan, estaremos sujetos a cualquier variación en cualquier momento”, dijo Eric Ramírez, director regional para Latam de Urban Science.
Destacó que al contar con una base productiva propia al nivel de las grandes armadoras como Nissan, Volkswagen o General Motors, México podría elevar su competitividad, atender al mercado nacional e incrementar sus exportaciones.
“Lo comentó recientemente el secretario de Economía que volverían a revisarlo, si vale la pena volver a pensar en un vehículo producido en México para México principalmente y eso podría ser un plan alternativo por si las negociaciones en miras del las nuevas reglas para el comercio de Norteamérica no son tan favorables a México”, agregó.
Finalmente los especialistas señalan que México aún puede tomar ventaja de otros acuerdos comerciales con el mundo y abrir nuevos puentes para la exportación de vehículos, aunque esta iniciativa pueda tardar en consolidarse al nivel de la interacción regional que ha logrado Norteamérica en los últimos 30 años. Mientras tanto la industria se alista para la antesala de la revisión del T-MEC que podría iniciarse a partir de julio.