Los gobiernos de Guatemala y Estados Unidos ofrecieron este martes recompensas para quienes aporten información que ayude con la captura del narcotraficante Haroldo Waldemar Lorenzana, quien está identificado como líder de una organización criminal en el este del país centroamericano y con vínculos con los carteles mexicanos de la droga como el de Sinaloa.
La Embajada de Estados Unidos en Guatemala, por medio de un comunicado, informó que el Departamento de Estado ofrece cinco millones de dólares por información que “conduzca al arresto y condena” de Lorenzana. Esta persona está acusada en una corte federal de Columbia por tráfico de cocaína.
Al respecto, el gobierno de Guatemala se sumó a los esfuerzos anunciando que dará otra recompensa de 6,500 dólares a las personas que aporten información para detener al presunto delincuente, que desde 2021 figura entre los 100 más buscados por el ministerio de Gobernación (Interior) de Guatemala.
Lorenzana es señalado por la Administración para el Control de Drogas (DEA) de pertenecer al clan de su familia que desde 1996 se ha dedicado al tráfico de drogas y ha creado vínculos con otras organizaciones criminales de la región.
Un linaje de narcotraficantes en Guatemala
En 2008, Walder Lorenzana Lima, padre del hombre buscado y considerado como el patriarca de la organización criminal, fue detenido y condenado por narcotráfico en Estados Unidos en 2014, posteriormente fue repatriado a Guatemala, donde falleció a los 81 años en 2021.
De forma concreta, Estados Unidos describe el papel de los Lorenzana como la organización que facilitaba el traslado de cargamentos de droga provenientes de Suramérica por el territorio guatemalteco hasta las fronteras con México.
Apenas el pasado 20 de marzo, miembros de la Marina del Ejército de Guatemala localizaron tres tulas flotando en aguas del océano Pacífico que contenían 150 paquetes de posible cocaína.
De acuerdo con el Ministerio de la Defensa Nacional, las tulas estaban flotando frente a las costas del departamento (provincia) de Escuintla, en el sur del país, y fueron trasladadas a tierra firme.