La Universidad de Harvard está imponiendo una pausa temporal en la contratación de personal y profesores, ya que el riesgo de recortes de fondos federales por parte de la administración Trump amenaza las finanzas de las universidades estadounidenses.
Harvard, la universidad más rica de Estados Unidos con una dotación de 53 mil millones de dólares, es una de las varias escuelas que están siendo investigadas por el gobierno por su presunta incapacidad para abordar el antisemitismo en el campus.
La semana pasada, el gobierno dijo que cancelará 400 millones de dólares en subvenciones y contratos federales a la Universidad de Columbia, citando quejas de estudiantes judíos desde el ataque del 7 de octubre de 2023 de Hamás contra Israel.
“Necesitamos prepararnos para una amplia gama de circunstancias financieras, y los ajustes estratégicos llevarán tiempo para identificarlos e implementarlos”, escribió el presidente de Harvard, Alan Garber, en un comunicado el lunes.
“En consecuencia, es imperativo limitar los nuevos compromisos significativos a largo plazo que aumentarían nuestra exposición financiera y harían que los ajustes futuros fueran más disruptivos”.
¿Por qué Trump amenazó con recortar fondos a escuelas de EU?
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, amenazó con recortar la financiación federal a cualquier escuela o centro de educación superior del país que permita protestas “ilegales” y llegó a advertir que encarcelará o deportará a los estudiantes que participen en ellas.
“Se detendrá toda la financiación federal para cualquier colegio, escuela o universidad que permita protestas ilegales. Los agitadores serán encarcelados o enviados permanentemente de regreso al país del que vinieron”, anunció el mandatario en su red social, Truth Social.
Mientras que “los estudiantes estadounidenses van a resultar expulsados permanentemente o, dependiendo del delito, arrestados”, añadió Trump.
La amenaza de Trump a los fondos de las escuelas de EU
Mientras tanto, las palabras de Trump responden a las protestas que estallaron en abril de 2024 en campus universitarios de todo Estados Unidos contra la guerra en Gaza y el apoyo de Washington a Israel. Estas manifestaciones se prolongaron durante unos tres meses y resultaron en la detención de aproximadamente 3 mil 100 personas.
A finales de enero, Trump firmó una orden ejecutiva en la que prometía mano dura contra el movimiento propalestino, al que calificó de “proyihadista”, incluyendo identificar a los estudiantes extranjeros que participaron en las protestas para deportarlos y cancelar los visados de aquellos que considerara “simpatizantes de Hamás”.
Además, muchos de los estudiantes que participaron en las protestas han negado que apoyen a Hamás o que hayan incurrido en actos antisemitas, afirmando que su objetivo era manifestarse contra la ofensiva militar de Israel en Gaza, donde han muerto más de 47 mil personas.
* Con información de EFE