El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, afirmó que está dispuesto a reducir los aranceles a China en algún momento porque los gravámenes actuales son tan altos que las dos economías más grandes del mundo prácticamente han dejado de comerciar entre sí.
Trump ha impuesto aranceles de hasta el 145 por ciento a las importaciones chinas. China ha respondido con 125 por ciento a las importaciones estadounidenses. Estas medidas han sacudido los mercados y amenazan con disparar los precios de los equipos de fabricación, así como de productos asequibles de los que dependen muchos estadounidenses, como ropa y juguetes.
“En algún momento, los voy a reducir, porque de lo contrario, nunca se podría hacer negocios con ellos, y ellos tienen muchas ganas de hacerlo”, declaró Trump en una entrevista transmitida, este domingo 4 de mayo, en el programa Meet the Press de la NBC con Kristen Welker.
Señaló las recientes dificultades económicas en China, donde la actividad fabril ha sufrido la peor contracción desde 2023, según el índice oficial de gerentes de compras del sector manufacturero. Los nuevos pedidos de exportación cayeron a su nivel más bajo desde diciembre de 2022 y registraron la mayor caída desde abril de ese año, cuando Shanghái entró en confinamiento pandémico en toda la ciudad.
Trump también elogió algunas declaraciones recientes de China como “positivas”, al tiempo que reiteró que cualquier acuerdo entre ambos países debe ser “justo”.
China declaró, el pasado viernes 2 de mayo, que estaba evaluando la posibilidad de entablar conversaciones comerciales con Estados Unidos desde que se anunciaron los aranceles de Trump el mes pasado, la primera señal de que podrían comenzar las negociaciones entre ambas partes.
“China está evaluando esto actualmente”, indicó el comunicado del ministerio. Las acciones estadounidenses subieron el viernes tras estas señales de Pekín.